80 | 29, pp. 75-95 | doxa.comunicación

julio-diciembre de 2019

Pervivencia en la serie de televisión “La que se avecina” de los estereotipos contra las mujeres denunciados...

ISSN: 1696-019X / e-ISSN: 2386-3978

ésta se mantiene estable en torno al 20%, aunque en la sexta temporada un capítulo batió el récord con 27,1% de share y 5.400.000 personas delante de la pantalla.

La que se avecina narra las relaciones generadas en una surrealista comunidad de vecinos en la que alrededor de veinte personajes reflejan sus vidas con una buena dosis de humor negro. La serie fue una secuela de Aquí no hay quien viva emitida en Antena 3 desde el 7/09/2003 a 6/07/2006, cadena que presentó una querella por plagio a Telecinco, aunque finalmente no prosperó. LQSA se reemite a diario desde 2010, en Factoría de Ficción, Comedy Central y también en Movistar+ y Vodafone TV, además de estar omnipresente en algunas de las páginas web de estas cadenas, así como en la propia página web de la serie: https://comunidadmontepinar.es/

Aunque esta comedia está destinada a un público juvenil y adulto, en las últimas temporadas ha aumentado la audien-cia entre adolescentes. De los 3.618.000 espectadores registrados, el 52,5% tenían entre 13 y 24 años, siendo LQSAV el programa más visto por ese grupo de edad, en esa misma franja horaria. El éxito de la serie ha estado acompañado por numerosas críticas por sus chistes y comentarios homófobos, racistas y machistas, tal y como se recoge en diferentes medios como ABC (2016) como en redes sociales. Como apunta Vacas Gómez (2017:432) el éxito de esta serie “se basa en la comicidad radical del planteamiento de sus historias y de la estereotipación de sus personajes llevada al extremo”.

Esta serie de TV se ha convertido en mucho más que una simple cita semanal. A lo largo de once temporadas, desde 2007, ha pasado a formar parte de la vida de unos tres millones de personas, más de la mitad niños y adolescentes, tal y como se ha dicho. Como se afirma en el Informe del Instituto de la Mujer (2007: 98) la serie Aquí no hay quien viva “creó estereoti-pos sexistas, tanto en el caso de las mujeres como en el de los hombres, potenciando el tratamiento desigual para ambos sexos. En los personajes mujeres (de dicha serie) están presentes muchos patrones feminizantes estigmatizados”. Otro dato a tener en cuenta sobre esa serie es que era la teleserie más conocida por la gente joven (2007:116), con un 83,5% de hombres y un 86,8% de mujeres. Y, el dato más preocupante lo arroja el 44,4% de encuestados que apoya la tesis de que su teleserie favorita representa fielmente la realidad, (2007: 150).

Desde 2007, la audiencia de La que se avecina se ha ido agrupando no sólo en torno al TV durante los diferentes días de la semana en los que han echado este programa, sino también en internet, el resto de los canales y a través de la página web del sitio. La emisión de las series en Internet amplía las tipologías de los medios de comunicación, sus formas, con-textos e interacciones, con la particularidad de que generan un debate inmediato que prolonga el propio contenido, así como sus influencias. Ya no es solo ver la serie en el televisor y comentarla al día siguiente con las amistades, en el traba-jo o en el instituto. A través de la multiplicación de contenidos, como afirman Hernández-García, Ruiz-Muñoz y Sime-lio-Solà (2013:453), “los usuarios han integrado entre sus prácticas cotidianas la apropiación de los contenidos televisivos para reelaborarlos, transgredirlos, reinventarlos y, en última instancia, redistribuirlos a través de las nuevas ventanas de explotación”.

En esta línea Lacalle y Castro (2016: 147) han prestado especial interés al seguimiento que las fans hacen de sus series fa-voritas en Internet y aseguran que “complementario a las estrategias de marketing implementadas por medio de redes en Internet (distribución de información e imágenes de programas, streaming, merchandising, participación de los actores, etc.), los diálogos entre fans tienen implicaciones culturales, sociales y económicas (Lee, 2012)”.