4.2. El vocablo desescalada

El término “desescalada” está formado por la base léxica “escalar” a la que se le añade el afijo prefijo “des-”. Los prefijos son partículas léxicas que, añadidas a una palabra, influyen en su significado aportando al individuo una cosmovisión concreta, que no poseería, en efecto, sin esa partícula.

Una de las clasificaciones de los afijos se refiere a su origen que los sitúa como procedentes del latín o procedentes del griego. Sobre este particular también el DLE (2014) ofrece una explicación acerca del origen del prefijo “des-”:

Confluencia de los prefs. lats. de-, ex-, dis- y a veces e-.1. pref. Denota negación o inversión del significado de la palabra simple a la que va antepuesto. Desconfiar, deshacer.2. pref. Indica privación. Desabejar.3. pref. Indica exceso o demasía. Deslenguado. 4. pref. Significa ‘fuera de’. Descamino, deshora. 5. pref. A veces indica afirmación. Despavorido.

También la NGLE (2009) establece que el prefijo añadido “des-” significa, entre otras cosas, ‘privación’, ‘negación’, además de ‘volver al estado anterior’.

En este caso se ha añadido al verbo escalar que el Diccionario Enciclopédico Universal (1990) define como:

1. Entrar en un lugar valiéndose de escalas.

2. Trepar por una gran pendiente o a una gran altura.

Las entradas del DLE (2014) son similares:

1. tr. Entrar en una plaza fuerte u otro lugar valiéndose de escalas.

2. tr. Subir, trepar por una gran pendiente o a una gran altura.

Del análisis comparativo de las dos fuentes consultadas podemos concluir:

1. Que el concepto “escalada” mantiene diacrónicamente un carácter gradual de ascenso.

2. Que también ambas fuentes señalan la necesidad de recurrir a utensilios para conseguir su objetivo.

Estas conclusiones nos resultan útiles para el análisis pragmático del eufemismo “desescalada” del que podemos destacar los siguientes rasgos: