274 | 31, pp. 265-281 | doxa.comunicación

julio-diciembre de 2020

Ideologías lingüísticas del español en comunidades y páginas de Facebook: políticas de lengua e identidad social...

ISSN: 1696-019X / e-ISSN: 2386-3978

Es así que el ideologema de que en Chile se habla mal, al menos según se evidencia en Facebook, no moviliza con urgencia a que la población ajuste su idioma a la norma estándar y tampoco la empuja a que busque autonomizar ni formalizar su diferencia lingüística. ¿Implica esto que la población chilena no vierte sus problemáticas de lengua e identidad a la red so-cial? ¿Qué ocurre con las representaciones de anonimato, autenticidad y orgullo descritas por la teoría en otros ámbitos? ¿En qué instancias de Facebook sería posible encontrar este tipo de ideologías de lengua?

Fue preciso entonces replantear el modo de rastreo y selección de corpus de Facebook para detectar espacios donde se pusieran en relieve ideologías de lengua, y recurrir intuitivamente a intersticios de la red social donde dichas ideologías se codificasen de modo ilustrativo y, finalmente, conducente a una etapa de lectura crítica más informativa. Con el fin de resolver esta cuestión se hizo un sondeo a páginas y comunidades de Facebook intervenidas por tropos de identidad nacional donde se desplegasen problemas de lengua de manera densa e informativa. Era fundamental que contaran con muchos seguidores (índice de un alto impacto social), lo que propiciaría intercambios nutridos y dilatados en torno a diversos temas, incluido lo lingüístico. Luego de evaluar espacios digitales dedicados a folclor, tradiciones chilenas, gastronomía, partidos políticos, organizaciones municipales y regionales, y otras, hemos optado por seguir la pista a si-tios humorísticos donde se ironiza sobre clichés identitarios. Estos corresponden a páginas/comunidades de humor que permiten acceder a discursos en torno a lengua, identidad y clase social de un modo que se puede vincular rápidamente con lo político.

Las comunidades de tipo “Es de…” se caracterizan por la producción y difusión de memes que constan de un único texto breve, por lo general una consigna en clave de humor articulada con una premisa identitaria, por ejemplo: “es de roto / depilarse el pecho”; “es de cuica / que tu mamá esté bronceada todo el año”; “es de mapushe (sic)/ ser informante para una tesis”. Estas articulaciones permiten que los ideologemas expresados circulen en dominios como Facebook o Twitter con fluidez mediante hashtags (#esdecuica; #esderoto), volviéndolos fácilmente rastreables en el medio digital.

Se eligieron los dos espacios de este tipo de mayor dinamismo y repercusión: Es de roto (con 522 mil seguidores en agosto de 2019) y Es de cuica (340 mil en la misma fecha). Al tiempo que proveen abundantes discursos explícitos acerca de lo lingüístico, también han trascendido más allá del ámbito digital; sus gestores tienen a su haber publicaciones de libros y apariciones en medios hegemónicos, particularmente en prensa y televisión.

Además, el componente de clase social constituye el núcleo más relevante para un análisis crítico de los problemas de lengua, nación y sociedad en Chile, un país donde las distinciones de clase son sumamente acusadas y la pertenencia a un cierto estrato determina casi por completo el modo y las experiencias de vida de cada persona. En este orden, la lengua es clave para la constitución y la perpetuación de límites de clase, constituyendo un territorio de permanente disputa y negociación (Woolard, 2007; Gal y Woolard, 2001; Kroskrity, 2000). Convenientemente, el contraste entre las figuras dis-cursivas del roto y la cuica da pie a un análisis altamente provechoso, toda vez que aborda dos representaciones prototí-picas diversas (y hasta cierto punto complementarias) de autenticidad y legitimidad de lo chileno, posicionadas en una dialéctica compleja donde la clase social es el elemento central, pero no el único, de producción de sentido.

En el orden simbólico de clase social chileno, la figura del roto remite al prototipo del mestizo de la clase trabajadora urbana, históricamente vilipendiado por su percibida falta de modales y de educación (Gutiérrez, 2010; Plath, 1957). Sin