doxa.comunicación | 29, pp. 169-196 | 171

julio-diciembre de 2019

Cesibel Valdiviezo-Abad y Tiziano Bonini

ISSN: 1696-019X / e-ISSN: 2386-3978

El objetivo de la investigación es, determinar el estado actual de la automatización inteligente en la gestión de la comuni-cación en las organizaciones.

Como pregunta de investigación se determinó, PI: ¿Son necesarias las nuevas tecnologías en la automatización de la ges-tión de la comunicación de las organizaciones?

Como estrategia de búsqueda se utilizaron palabras claves: automatización o automation, big data, comunicación, au-tomatización inteligente, automation in comunication, marketing automotion, automatización inteligente de procesos, algorithms in comunication, industria 4.0, inteligencia artificial.

Las bases de datos empeladas para la búsqueda de artículos académicos fueron: IEEE Xplore, ScienceDirect, Scopus, Scie-lo, Google Scholar y Dialnet.

3. Transformación de la revolución industrial 1.0 a la 4.0

Según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española (2019), la palabra revolución significa un cambio rápido y profundo en cualquier cosa. Por tanto, las revoluciones que han surgido y que se han provocado a lo largo de la humani-dad, han traído consigo diversas etapas íconicas en la transformación del mundo, lo que ha impactado especialmente las esferas económicas, sociales y comunicativas de las personas.

La historia manifiesta que para llegar a la revolución 4.0, existieron tres etapas que le antecedieron a ésta. Donde, incluso, antes del inicio de estas etapas, el ser humano pasa de ser nómada a convertirse en sedentario y productor de sus propios insumos y productos para la supervivencia. Sumado a ello, la manera artesanal de elaboración de los mismos productos. Hasta que, muchísimos años más tarde, aparece la primera revolución industrial. Para Klaus Schwab, (2016) ésta abarcó desde 1760 hasta más o menos 1840, aunque sus orígenes pudieran ser antes. Momento crucial para el hombre donde co-mienza a surgir la generación y creación de nuevos inventos, como la introducción de la máquina de vapor de James Watt en la industria de Gran Bretaña, la construcción del ferrocarril y muchísmos inventos más que impulsaron la creación de diversas fábricas y cerca de ellas empezaron a habitar conglomeraciones de personas que atendían las necesidades labora-les demandantes en dichos momentos. A estos lugares, años después, se les denominaría ciudades.

La segunda revolución industrial, surge entre finales del siglo XIX y principios del XX, aquí aparecen nuevos visionarios como Henry Ford, quien promovió la generación de trabajos a gran escala, los denominados de tipo fordista. Una produc-ción que se vió impactada por el invento de la electricidad, lo que repercutió profundamente en la vida de las personas.

Luego llegó la tercera revolución industrial, conocida también como postindustrial o como la época del ordenador o revo-lución digital. Se caracteriza principalmente por el invento de la computadora, la ciencia de la computación y la informá-tica. Acompañado a ello, nuevos cambios digitales que atienden diversas necesidades de las personas, empresas y organi-zaciones de la época. “El nacimiento de Internet, en la segunda mitad del siglo XX, fue lo que marcó la Tercera Revolución Industrial, conocida también como revolución digital” (Paramio y Hernando, 2019, p. 154).

A criterio de Rafael Macau (2004, p. 4), es en la década de los ochenta, Tercera Revolución Industrial, donde el impacto de la tecnología es más evidente para las organizaciones, incluso más de lo imaginado y comprendido hasta ese momento por