doxa.comunicación | 27, pp. 99-120 | 117

julio-diciembre de 2018

Juan Carlos Córdoba Laguna

ISSN: 1696-019X / e-ISSN: 2386-3978

4.3.2. Medios electrónicos

Caso Ingrid Betancourt. Este fue novedoso en medios de comunicación debido a los cambios tecnológicos y del modelo comunicativo, donde ahora el usuario tiene la autonomía para escoger medio de comunicación, hora y qué fragmentos de la información quiere consumir; esto hizo que, cuando sucedió la liberación de Betancourt, el 2 de julio de 2008, las audiencias se atomizaran en diferentes medios, tales como sitios de noticias y portales de instituciones públicas. El portal Equinoxio publicó, en esa tarde, cómo había sido la cubertura del hecho en 18 de los más importantes sitios de noticias del mundo.

El impacto mediático de la “Operación Jaque”, como fue denominado el operativo militar de liberación, hizo que los usua-rios colapsaran los sitios locales de información, los cuales realizaron actualizaciones informativas durante todo el día. Este hecho mantuvo características de cobertura de los medios tradicionales, como el uso de fuentes primarias, en este caso el ejército, la descripción del hecho con esquemas casi cinematográficos, debido a que este, como otros sucesos descritos aquí, fue una realidad que superó la ficción, pero apoyada, esta vez, con recursos multimedia de audio, imagen y vídeo.

La liberación de Betancourt fue uno de los primeros casos en donde las consideradas hasta ese momento como nuevas tecnologías de la información, sirvieron de apoyo en la construcción de un escenario espectacular, el cual ofreció la posibi-lidad al usuario de interactuar con los volúmenes de información construidos sobre el hecho, segundo a segundo.

Aun así, ya las características de los nuevos medios se vieron, en este caso, un año antes de la liberación, en el portal electrónico La Jornada, en donde se hablaba sobre versiones de la muerte de Betancourt, es decir, las noticias falsas más comunes en estos medios, así como el hecho narrado con riqueza de imágenes, dramatizaciones y animaciones especial-mente en la recreación de la liberación, su llegada a Bogotá y su salida hacia Francia. Pocos análisis de fondo, datos nuevos e implicaciones del hecho; una repetición que, más que saturar, pareció complacer a las nuevas audiencias.

El siglo XXI parte en materia de manejo de la información con lo espectacular instaurado y afincándose; situación faci-litada por: su exitosa propagación a través de las herramientas tecnológicas, las priorización de las audiencias globales, incluida la colombiana, de consumir a través imágenes y la posverdad como una forma de describir las situaciones, la cual está presente en el cotidiano de los individuos.

5. Discusión

En Colombia, los grados de espectacularidad aumentaron exponencialmente en medios de comunicación a través de las décadas, explicado por su desarrollo tecnológico, lo cual incidió en la formación de una sociedad con característica de la postmodernidad que se alejó de la razón como un eje conceptual, principio de la modernidad, y se acercó a lo emotivo; esta situación ha afectado las formas de relación y de cohesión social y ha facilitado la aceptación en las audiencias de contenidos espectaculares construidos con técnicas que garantizan resultados específicos.

El esquema de producción casi industrial de mensajes con características espectaculares ha sido facilitado por el contexto colombiano, en donde, de forma constante, se producen imágenes e historias atrayentes, las cuales, muchas veces, no ne-cesitan una narración oral o ubicarse en un contexto para ser consumidas por diferentes tipos de público. Además de los