92 | 27, pp. 81-97 | doxa.comunicación

julio-diciembre de 2018

Medios sociales y la participación política y cívica de los jóvenes. Una revisión del debate en torno...

ISSN: 1696-019X / e-ISSN: 2386-3978

Por otra parte, la educación para la ciudadanía es esencial con el propósito de que el individuo, desde su juventud y desde etapas etarias anteriores, sepa mostrar una visión crítica y constructiva del entorno. La literatura relacionada incide en el desarrollo de esta formación que despierte la motivación y el empoderamiento; sin embargo, las investigaciones eviden-cian que esta educación no se está poniendo en práctica de forma correcta y suficiente.

Conectado con lo anterior, el consumo y difusión de la información es clave para la formación del ciudadano. Sin embar-go, no hay coincidencia científica entre cuál es la causa y cuál el efecto: si la consulta y publicación de noticias refuerza la voluntad del individuo para ejercer su rol como ciudadano o si realmente es necesaria esa cualidad para interesarse por la actualidad. Al margen de esta disyuntiva, es evidente que la generalización de Internet ha marcado un antes y un después en el consumo y difusión de información aportando un sentido integral al concepto de prosumidor, especialmente entre los jóvenes que, por su naturaleza digital y por su escasa afinidad con los medios tradicionales, optan mayoritariamente por ejercer esta acción en redes y medios sociales digitales.

La revisión que se ha llevado a cabo sobre la producción científica en este siglo XXI en torno a ciudadanía y participación política pone de manifiesto la evolución que se ha producido: el papel de los medios sociales en las diferencias entre lo online y lo offline en el compromiso político y el papel de la educomunicación para fomentar el pensamiento crítico.

Los respectivos significados de ciudadanía y participación política han evolucionado más las formas que el fondo. Los fines se han mantenido a lo largo del tiempo, aunque destaca la manera en la que se han desarrollado ambos supuestos. Son precisamente las acciones lo que condiciona la significación del ciudadano comprometido en un sentido más innovador o más clásico; en un estilo más expresivo o más tradicional. En el desarrollo de las diferentes acciones toma un papel predo-minante el acceso a Internet y el dominio de las nuevas tecnologías.

Es precisamente la facilidad de acceso a lnternet y a las redes sociales las que han hecho nacer un nuevo activismo que ha evolucionado hacia el ciberactivismo. En este último, la ciudadanía percibe mayor posibilidad de participación y se redescubre como alguien comprometido socialmente, dispuesto a resolver problemas de la comunidad o a participar en la promoción de conversaciones con los servidores públicos que podrían resolverlas. No transforma de manera directa la sociedad pero da la sensación, a quien lo practica, de que está comprometiéndose socialmente.

Estas actitudes, en los sistemas democráticos con el derecho a la libertad de expresión consolidado, vienen derivadas prin-cipalmente por la facilidad de acceso a las redes sociales. Sin embargo, las redes sociales toman protagonismo en aquellas sociedades donde la libertad de expresión offline no está garantizada.

Hay dos aspectos importantes aún por potenciar en este ámbito de la ciudadanía digital: por un lado, si bien es cierto que las organizaciones usan cada vez más las herramientas online de comunicación, la motivación respecto a su uso queda muy reducido; podrían potenciar la intercomunicación con el ciudadano, usuario de las redes sociales, a través de la crea-ción de plataformas específicas para la acción comprometida. Y, por otro lado, es necesario que desde los ámbitos docentes se empiece a tomar conciencia de la importancia de desarrollar la alfabetización mediática crítica, que ayudará, como consecuencia, a alcanzar mayores niveles de compromiso social y, por tanto, el ejercicio de una ciudadanía digital real.

Para poder adoptar una nueva conceptualización de la ciudadanía es preciso, por tanto, la transformación de diferentes elementos que conlleven, entre otros aspectos, una nueva visión de la participación ciudadana con una asunción auténtica