Abstract
Se estudia la estrategia de las empresas privadas de televisión de cobertura nacional que se sirven de informes de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) para ganar reputación exhibiéndose como socialmente responsables. Las memorias difundidas sobre medidas de sostenibilidad por compañías de televisión se prestan a confusión porque el concepto genérico de RSC, atención al medioambiente natural, no se adecua al fin social específico de la programación de contenidos. Los autores proponen distinguir entre obligaciones comunes de RSC, como las de sostenibilidad y medioambientales, y responsabilidades específicas de RSC, propias de su objeto social, que en el caso de las televisiones son los contenidos de la programación. El objetivo es elaborar un protocolo de categorías de RSC centrado en los que la doctrina ha denominado contenidos de riesgo (CR). Para elaborarlo, se cotejaron las principales fuentes normativas disponibles sobre tratamiento de contenidos, textos legales, libros de estilo, códigos de autorregulación, estudios de autoridades audiovisuales, estudios de asociaciones de espectadores. Las diez categorías de CR obtenidas por este procedimiento aplicadas a una muestra más completa realizada hace tres años, se aplican ahora, en un nuevo proyecto, a una selección de programas de 2014 a fin de apreciar si se confirma la tendencia de las cadenas de menospreciar los contenidos y si ha habido algún cambio significativo en la programación.