El problema de la exclusión social puede catalogarse entre los asuntos escasamente tratados por los medios, a pesar de las preocupantes cifras que alcanzan en nuestro país, y que como en el caso del paro con el que está tan íntimamente relacionado, nos separan de los países de nuestro entorno europeo. Cuando se cubre suele ser con un enfoque centrado en cifras con parámetros estadísticos, que no atrae a las audiencias, como se ha podido comprobar estudiando los contextos cotidianos donde se llevan a cabo distintos tipos de consumo mediático. Aunque los periodistas especializados que cubren el tema aportan el contexto y los matices necesarios, no informan habitualmente de la labor de las instituciones para mejorar la inclusión social. Tampoco se suele incluir anécdotas y testimonios de personas afectadas como recomiendan los datos del aprendizaje automático sobre nuevas narrativas que aumentan las audiencias. Sin embargo, el análisis de redes sociales permite ampliar el alcance en el nuevo entorno mediático, tal y como ha podido comprobarse estudiando la información sobre FOESSA en distintos medios en Twitter.