Lecciones magistrales y memorias

Este trabajo presenta la profunda transformación de la economía española de los últimos diez años (1993-2003). Para ello describiremos los principales factores que han posibilitado la modernización económica de España. Entre ellos: el proceso de apertura de la economía al exterior. la puesta en marcha de la moneda única. el saneamiento de las finanzas públicas (a través del equfübrio presupuestario), la política de privatizaciones y la liberalización de los mercados tanto de bienes y servicios como de factores. Diez años después, en el año 2004. España forma parte de la Unión Económica y Monetaria (UEM), comparte con los países europeos la estabilidad macroeconómica, a la vez que mantiene ritmos de crecimiento y de empleo más dinámicos que la media de la Eurozona. La historia macroeconómica de España de los últimos años se caracteriza. en primer lugar, intentar alcanzar el objetivo de estabilidad interna y externa. Para ello fue necesario aplicar una serie de instrumentos que permitiesen superar los graves desequilibrios generados desde 1988 hasta 1993 entre los que cabría destacar: déficit público, déficit exterior, inflación y paro. En segundo lugar, por la fuerte apertura externa que ha hecho posible el crecimiento sostenido (superior a la media de la Unión Europea) en los ocho últimos años. Tercero, por el auge de la economía. que comienza en 1994 de forma muy tímida y que a partir de 1996 mejora en términos de convergencia con Europa. Es decir. es a partir de 1996 cuando España consigue un crecimiento diferencial positivo con la UE. La convergencia ha sido de 10 puntos. El PIB per cápita desde un 77.8 por 100 de la medja de la UE en 1994 a un 87,3 por 100 en 2003.

El hambre, que tiene solución, no es un problema demográfico, sino climático, geográfico, político y de mala distribución de los recursos. Parece que no existe a nivel mundial un mecanismo automático que permita la redistribución equilibrada de alimentos y se precisa, por tanto, de la cooperación internacional para conseguir la autosuficiencia alimentaria ·de los países del Tercer Mundo. Se puede afirmar que la solución está más en la transferencia de tecnología agraria y alimentaria que en la ayuda exterior, que aunque ha permitido salvar muchas vidas, tiene también una influencia perniciosa sobre el desarrollo agrario. La política de precios de intervención y de compra de excedentes de la UE muestra la irracionalidad de ciertas intervenciones, que impiden una mayor interrelación e interdependencia entre todos los países del mundo. La insolidaridad de la PAC está impidiendo a muchos países pobres exportar alimentos a Europa y conseguir así las divisas que necesitan para financiar su desarrollo económico. Sólo el avance tecnólogico y la solidaridad internacional pueden resolver los problemas del hambre del mundo.