203 | 31, pp. 187-205 | doxa.comunicación

julio-diciembre de 2020

Recursos literarios empleados por Leila Guerriero en sus perfiles periodísticos

ISSN: 1696-019X / e-ISSN: 2386-3978

2001 cuando empieza a especializarse en el género del perfil. En las dos grandes antologías dedicadas exclusivamente a su obra, Frutos Extraños (crónicas reunidas 2001-2008) (2012, Alfaguara) y Plano Americano (2013, Universidad Die-go Portales), de la primera, de 16 textos periodísticos, 13 son perfiles y tres, crónicas; de la segunda los 21 textos son perfiles. Si a esto sumamos los dos libros-perfil publicados por Leila Guerriero, Una historia sencilla (2013, Anagrama) y Opus Gelber (2019, Anagrama), se comprueba que la mayor parte de la producción periodística de Guerriero está dedicada a los perfiles, en los que se ha convertido en una maestra.

2. A diferencia de una gran parte de los textos del Nuevo Periodismo Latinoamericano, en los perfiles de Leila Guerriero desaparece el yo-narrador. Están escritos en su mayoría en una tercera persona atenuada –ha estado presente en la realidad, pero aparece solo ocasionalmente en el texto, el relato se construye a partir de la observación directa– y en raras ocasiones es un narrador presente como personaje de la historia, pero siempre desempeñando un papel secun-dario de observador. En cuanto a la perspectiva o modo, se puede hablar de focalización interna –narrador dice lo que sabe tal personaje– con largos pasajes de focalización externa –narrador sabe solo lo que observa– y excepcionalmen-te de no focalización –el narrador sabe más que el personaje– o incluso, retorciendo este último concepto, de falsa no focalización: Guerriero simula que sabe más que el personaje, pero no es cierto. Esa complejidad en el modo y en la voz y la subversión de los cánones tradicionales del periodismo es uno de los rasgos que otorga originalidad a la obra de Guerriero.

3. El estilo de Leila Guerriero en sus perfiles está marcado por el ritmo y la musicalidad. Para obtener el ritmo utiliza las distorsiones temporales de orden –analepsis, prolepsis, acronías– y las de duración que tengan que ver con la frecuencia como la elipsis. Para obtener la musicalidad, emplea todos los recursos literarios a su alcance: aliteración, paranomasia, derivación, juegos de palabras y, en general, todos los relacionados con la fonética. También es muy habitual que utilice los relacionados con los elementos de la frase o con la concordancia –anacoluto, estilo indirecto libre– y con la significación –tropos como metáfora, oxímoron, antítesis, comparación, metonimia-sinécdoque-.

Así, el estilo de Guerriero adquiere una gran riqueza formal. Guerriero experimenta con los recursos literarios sin perder nunca de vista el contenido, es decir, forma y fondo van a la par. Y al mismo tiempo consigue que su escritura posea una musicalidad y un ritmo que la acercan en ocasiones a los de la poesía.

4. Guerriero toma del New Journalism ciertos recursos –recursos que a su vez están en la literatura de ficción– como son la construcción de escenas, la transcripción de diálogos enteros y la descripción de los detalles que indican el estatus del perfilado, desde su indumentaria y su apariencia física hasta su entorno; y deja fuera aquellos que no encajan con su estilo como es la variación en el punto de vista.

5. Como se ha comprobado, los perfiles de Leila Guerriero poseen unas particularidades que marcan un estilo propio y muy diferenciado. Su uso de recursos del New Journalism, la complejidad en el modo y la voz, unida a la variedad y riqueza de los recursos literarios empleados que, a su vez, logran que el ritmo y la musicalidad impregnen sus textos, nos llevan a afirmar que ha creado una forma muy personal de hacer periodismo, extremadamente rigurosa en las investigaciones, que pueden durar meses o años como en sus perfiles-libro; también muy rigurosa en la plasmación de la información que ha recopilado; pero a su vez muy creativa y original en la escritura. Por todo lo expuesto ante-