En este artículo se analiza el pensamiento del tratadista eclesiástico Esteve Pinell a través de sus propias obras escritas y de las traducciones que hizo de autores italianos como Giuseppe Maria Saporiti y Cesare Calino. Se ponen en evidencia los debates que el clero mantuvo en torno a la religio-sidad femenina en la transición del Barroco a la Ilustración, con problemas como los límites del reco-gimiento, las ventajas o inconvenientes de la clausura y los riesgos de la sociabilidad femenina dentro de los conventos. Pinell representa muy bien la tercera vía entre los excesos del imaginario barroco y las necesidades del control emocional para llevar adelante la proyección social, misional y asistencial. La influencia que tuvieron figuras como Francisco de Sales, Vicente de Paúl o Juliana Morell sobre el discurso eclesiástico y las prácticas culturales quedan bien demostradas a través de la obra de Pinell.